Desde el año 2010, en reemplazo de la antigua celebración del día de la raza, cada 12 de octubre se conmemora el día del Respeto a la Diversidad Cultural.
El 4 de octubre de 1917 se había implantado, por decreto de Hipólito Yrigoyen, el día de la raza en recuerdo de la llegada de Cristóbal Colón a América, pero luego, en 2010, por decreto de la presidenta de aquel entonces, Cristina Fernández de Kirchner, se oficializó el cambio de nombre un 3 de noviembre.
El día promueve la reflexión histórica, el diálogo intercultural y el reconocimiento y respeto por los pueblos originarios, afro descendientes y migrantes, visibilizando la desigualdad y violencia social que éstos sufren.
Su idea principal es quitar el ojo de la mirada conquistadora para comprender y entender la perspectiva de los pueblos originarios.
Con motivo de ésta fecha, dialogamos con Alejandro Ludueña, taxista y músico, voz principal del conjunto Yana Wankar, y gran divulgador cultural.
¿Por qué es importante celebrar el Día de la Diversidad Cultural’. ¿Es una batalla que se pelea todos los años?
En realidad es una batalla que se pelea todos los días, no solamente cuando llega el 12 de octubre, su lucha es diaria, cotidiana y a cada momento. Es importante porque no hay razas, la cultura es diversa, porque no hay cultura en estado puro sino que son conformadas por distintas corrientes étnicas que son permanentes y cotidianas.
Personas que llegan con una historia cada uno, confluyen en un mismo lugar y nace la diversidad cultural que hay que celebrar y fomentar todos los días. Por eso la cultura y la diversidad cultural no es una foto que se toma y queda plasmada en un momento determinado, la cultura está en movimiento y se va formando y mutando constantemente.
¿Qué podemos hacer desde nuestro lugar personal para promover y fortalecer la diversidad cultural?
Primero, estudiar, leer, interiorizarse y después, de ser posible, hacer alguna visita o algún trabajo de campo. Se me ocurre nombrar al Cerro Colorado, por ejemplo, donde está la casa museo de Atahualpa Yupanqui, donde hay pictografías y se puede observar todo el Valle.
En la zona de Sierras Chicas hay muchas comunidades reconocidas como pueblos originarios, está el ejemplo de Pluma Blanca. El conocimiento lleva a la difusión y a la promoción de la diversidad cultural.
Estudiando, reconociendo y después transmitiéndolo en una charla con una persona, en un medio de difusión, en una clase, en un debate con un docente o con amigos, es necesaria la difusión. Ponemos el ejemplo de una zamba, que tiene reminiscencia española en el pañuelo, de los negros porque nace originariamente en Perú, y en los pueblos originarios por la propia coreografía, eso es diversidad cultural.
¿Qué ocurrió para que el Día de la Raza dejara de nombrarse como tal, para reconvertirse en el Día de la Diversidad Cultural?
Se llamaba día de la raza, pero ¿de qué raza estamos hablando? La respuesta tal vez se manifieste en un síntoma de dominación colonial, de hecho, quienes le ponen nombre a ese día son los españoles, porque supuestamente ellos vinieron a civilizar a ésta parte del mundo. Entonces se parte de una cuestión de dominación y coloniaje de los imperios europeos de aquel momento, en nuestro caso el de España.
Desde ese lugar es el día de la raza, más preciso de la raza española, pero ese nombre deja afuera a un montón de gente, deja afuera a América. Hubo una toma de conciencia y visibilización de que acá hay mucha gente, hay otras culturas diversas, distintas, que necesariamente deben respetarse y darles el lugar que merecen.
Estas culturas son tan distintas como complementarias, la diversidad cultural no es excluyente sino todo lo contrario, incluye y suma. La toma de conciencia hizo que una decisión política renombrara dicho día, reconociendo a los pueblos originarios de América y a la raza afro descendiente que llegó al continente con la esclavitud.
Se dice que para construir un futuro próspero es necesario conocer el pasado, ¿cuál es la importancia de conocer nuestras raíces y nuestros orígenes?
Si tengo que contestar con una fórmula te diría que es para no repetir errores del pasado, por eso necesitamos conocer. Es una respuesta fácil, pero es mucho más que eso. Como fruto del pasado es lo que somos hoy. Venimos de un continente diverso etnográficamente y culturalmente, la necesidad de conocer el pasado radica en la posibilidad de construir el presente y el futuro. Si sabemos de dónde venimos tenemos una gran posibilidad de saber hacia dónde vamos.
Por Ale Galvaliz